UN 9 DE FEBRERO...COMENZÓ TODO. 365 GRACIAS

Por: Daniel Durán


Hoy 9 de febrero de 2011, hace exactamente un año que "Hablemos de Fútbol" tomó rumbo en un viaje sin destino y sin un final fijado. Un camino en el que he podido conocer a mucha gente, grandes profesionales, personas y compañeros. Que han conseguido que un servidor crezca como "profesional" y como persona al mismo tiempo. 365 días han pasado desde que me embarqué solo en este viaje. Andadura en la que poco duré solo, ya que al poco tiempo se subieron mis amigos y mi pareja en el barco. Y ahora mismo consideron innumerable todos los que me acompañáis, o los que tan solo me saludásteis desde la orilla. Si en la actualidad todo se mueve por dinero, no puedo valorar cuanto cuesta todo esto que me habéis proporcionado. GRACIAS.

Cuando empecé esta andadura hace exactamente un año, no preveía ni estaba entre mis propósitos ni el 40% de todo lo que me ha ocurrido en este año. Algo por lo que debo de estar contento y satisfecho, todo el que se aventura en un proyecto nuevo, espera conseguir lo esperado y ansiado, pero más todavía, recoger frutos que ni uno mismo tenía en sus planes.

Cuando me aventuré ha dar vida a “Hablemos de Fútbol”, tenía el propósito de dar a conocer, a todo aquel loco que quisiera perder un poco su tiempo libre, mi visión del fútbol, mi punto de vista de cada suceso, cada noticia, cada información. Para ser sincero, no tenía mucha fe en que esto pudiera triunfar, en unos de mis momentos más optimistas me conformaba con que tan solo una persona me leyera (ahora también me doy por satisfecho con que tan solo una persona lea estas líneas).

Pero si algo por lo que estoy orgulloso de crear este proyecto, no ha sido ni por la repercusión de esta página, ni por el momento dulce que está atravesando el programa de “La Pizarra de Durán”, ni por nada relacionado con lo material. Si por algo estoy agradecido a este proyecto en el que me subí a bordo, ha sido por todas las personas a las que he podido conocer. Personas a las que aprecio, admiro y les presto toda la fidelidad y compromiso que se puede llegar a dar desde este mundo llamado Internet.
Personas que han confiado en mí en muchos momentos en los que ni yo me veía capaz para sus propuestas, personas que no dejan de enseñarme gratuitamente, personas que me han enseñado que por encima de los artículos, noticias, exclusivas, e incluso hasta por encima de la rivalidad de los equipos, está la amistad y el compañerismo.

Cierto es que he dedicado muchas horas a todo esto, pero cuando uno se rodea de buenos profesionales, buenas personas y mejores compañeros, esas horas se convierten en minutos. Minutos amenos, en los que compartes conversaciones, charlas, proyectos e incluso alguna que otra conversación personal se suele escapar por el camino.

Tengo mucho que agradecer a todo mi equipo de colaboradores y amigos en algunos casos. Los cuales me han apoyado desde el minuto 0 hasta este mismo instante, sin los cuales nada de esto hubiera sido posible, me han escuchado, ayudado, aconsejado y aguantado en muchísimas ocasiones. Muchos momentos en los que no fue fácil seguir adelante, pero con sus consejos y opiniones, todo parecía sencillo. Hace 365 días que les comenté esta locura que tenía en mi cabeza, que rondaba mis pensamientos desde hace unos días, y lejos de quitarse de en medio y abandonarme a la deriva, se unieron a mi proyecto, a su proyecto, del que todos tenemos que estar orgullosos ahora mismo.

Al igual que le tengo que estar agradecido a: José Antonio Vega, Alex, Jorge y Rafael. Todos ellos compañeros de http://www.vavel.com/, con los que compartí momentos impagables e irrepetibles en el programa de “The Best Football”. De verdad gracias por darme la oportunidad de estar, aprender y compartir momentos con todos vosotros.

No quería olvidarme ni mucho menos, de Aurelio Toral. Mi padrino en la telecomunicación, jeje. Se suele decir que lo más difícil de conseguir en esta vida, es ser una persona normal, humilde y sencilla. Aurelio reúne de sobra estas tres características y muchas otras que todo el que esté leyendo esto y haya tenido la oportunidad de hablar con él, me comprenderá. Siempre he dicho que si en este mundo como dije antes, llamado Internet, se puede utilizar la palabra amistad, estaría muy cerca de esta relación que me une con él. Al igual que Don Davor, al que muchos ya conoceréis gracias a http://www.vozmadridista.com/, no me extraña que muchos de vosotros ansiéis en conocerle, os intrigue quien será. Yo, he tenido la oportunidad de conocerle, y le estoy agradecido por aprender de él que no es más fan el que menos critica a su equipo, si no aquel que critica para mejorar a su club.

Y no menos agradecido tengo que estar a todos vosotros, que en realidad sois lo que realmente importa de todo esto, sin los cuales nada de esto sería posible. He aprendido mucho de vosotros, con vuestros comentarios de agradecimiento, con las críticas, con alguna que otra discusión que hemos mantenido ya sea por comentario, twitter, facebook o por cualquier otro lugar.

En un apartado especial, quería agradecer a todos los twitteros que me seguís, que me comentáis, que me apoyáis en mis proyectos, en mis aventuras. Que me dais consejos, opiniones, puntos de vista. Con los que mantengo innumerables conversaciones bien sea de fútbol, equipos, jugadores, o de la vida misma. Mis mas sinceras gracias a todos vosotros, a los cuales no os puedo nombrar individualmente, pero que vosotros sabéis a quienes me refiero.

Ya por último dar 340 gracias a Twitter, 25.183 a “Hablemos de Fútbol”, 528 a Facebook, 3.016 a “La Pizarra de Durán”, 171.819 a Youtube.

Vosotros sois partícipes de todos esos números, de todas esas cifras, sin vuestro apoyo, interés y seguimiento, como he dicho antes, nada de esto sería posible.

Y aquí finaliza este texto, donde no hablé de fútbol, sino de algo más importante, de personas. Me alegra que en muchos aspectos de la vida, una vida para nosotros futbolera, no siempre lo más importante es el equipo, los colores o los jugadores. Sino los títulos como en toda buena competición. Títulos que se entregan acompañados de amistad. Aquí no es más rico el que más dinero tiene, sino quien más títulos (amistades) gana a lo largo de una vida.